La Comisión de Servicios Públicos, presidida por el concejal Gustavo Fonseca, aprobó hoy por mayoría (sin apoyo del bloque de Fuerza de la Gente) un proyecto de ordenanza impulsado por el concejal Abelardo Losano, que impulsa modificar el Código de Tránsito para agregar la obligatoriedad de que los choferes de colectivos y trolebuses realicen el curso de Reanimación Cardiopulmonar (RCP), con la finalidad de poder realizar este procedimientos en pasajeros en emergencia.
En sus fundamentos, Losano sostiene que “La muerte súbita es la muerte resultante de una pérdida abrupta de la función cardíaca y en nuestro país produce entre 30 mil y 40 mil decesos al año, lo que representa alrededor de una muerte cada quince minutos”.
“La emergencia que surge de un paro cardiaco es tal que, por cada minuto que un paciente transcurre sin atención, disminuye un 10% su posibilidad de sobrevida. Por tanto las maniobras de resucitación (RCP) efectivas, realizadas por personal entrenado, dadas inmediatamente después del paro cardíaco súbito, pueden duplicar o triplicar las oportunidades de supervivencia de las víctimas”, agrega.
“Si tenemos en cuenta que el transporte Urbano de la Ciudad de Córdoba es utilizado por entre 450 mil y 500 mil personas por día, la capacitación de nuestros conductores de colectivos y trolebuses nos permitiría, ante una eventualidad, la posibilidad de salvar la vida de un conciudadano”, fundamenta el concejal.
Antes de despachar el proyecto, los concejales de comisión escucharon la exposición del Jefe de Tráfico de Coniferal, Miguel Tolosa, quien explicó que los choferes de dicha empresa “reciben el curso de RCP y primeros auxilios tanto choferes, como inspectores y supervisores”, y explicó que “un chofer de colectivo tiene muchas más exigencias diarias que las de un simple conductor, ya que debe atender desmayos, descompensaciones y hasta ataques con burundanga dentro de sus unidades durante el servicio”.